Modo Oscuro

Gaia: La ReligiĆ³n Pagana De La Madre Tierra

ago 14, 2016
Por Kevin Farrington

Cualquiera que haya estudiado el movimiento verde global sin duda alguna ha oĆ­do hablar de Gaia. Los creyentes en Gaia, o "Gaianos", como a menudo se refieren a sĆ­ mismos, afirman que la tierra es un ser viviente, un antiguo espĆ­ritu de la diosa, merecedor de adoraciĆ³n y reverencia.

diosa pagana Gaia durmiendo en el bosque con imagen de la Biblia verde

Sir James Lovelock, en su libro Gaia: Una nueva mirada a la Vida, afirma que "todas las formas de vida en este planeta son parte de Gaia - parte de una diosa del espĆ­ritu que sostiene la vida en la tierra. Desde esta transformaciĆ³n en un sistema vivo las intervenciones de Gaia han traĆ­do consigo la diversidad en la evoluciĆ³n de las criaturas vivientes en el planeta Tierra." Los gaianos enseƱan que la "Diosa de la Tierra", o la Madre Tierra, debe ser protegida de la actividad humana destructiva. Es esta creencia que alimenta el movimiento ambientalista, el desarrollo sostenible y un impulso global para la aboliciĆ³n de las naciones industrializadas por un modo de vida mĆ”s primitivo.

Dios vs la diosa Gaia

Los gaianos afirman que "somos parte de la naturaleza y la naturaleza es parte de nosotros, por lo tanto, Dios es parte de nosotros, y Dios estĆ” en todas partes, y todo es Dios". En realidad Gaia es un renacimiento de la "diosa de la Tierra" que se encuentra en muchas religiones paganas antiguas. El actual culto de Gaia es una astuta mezcla de ciencia, paganismo, misticismo oriental, wicca y feminismo.

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Al investigar este tema es asombroso observar cuƔntos prominentes lƭderes ambientales, polƭticos, cientƭficos y lƭderes religiosos profesan una creencia literal en Gaia. Los gaianos parecen haber infiltrado todos los niveles de poder en las Naciones Unidas y haber ascendido a posiciones prominentes en muchos gobiernos. Se podrƭa percibir correctamente como el culto mƔs peligroso y tortuoso en la faz del planeta.

"AĆŗn mĆ”s importante es la implicaciĆ³n de que la evoluciĆ³n de los seres humanos, con su inventiva tecnolĆ³gica y su cada vez mĆ”s sutil red de comunicaciones, ha aumentado enormemente la gama de percepciĆ³n de Gaia. Ella ahora estĆ” a travĆ©s de nosotros despierta y consciente de sĆ­ misma. Ella ha visto el reflejo de su rostro justo a travĆ©s de los ojos de los astronautas y las cĆ”maras de televisiĆ³n de las naves espaciales en Ć³rbita. Nuestras sensaciones de asombro y placer, nuestra capacidad para el pensamiento y la especulaciĆ³n consciente, nuestra inquieta curiosidad y motivaciĆ³n son con ella compartidos.

Esta nueva interrelaciĆ³n de Gaia con el hombre no estĆ” en modo alguno plenamente establecido; No somos aĆŗn una especie verdaderamente colectiva, acorralada y domesticada como parte integrante de la biosfera, somos como criaturas individuales. Puede ser que el destino de la humanidad sea ser domesticado, de modo que las fuerzas feroces, destructivas y codiciosas del tribalismo y del nacionalismo se funden en un impulso de pertenecer a la comunidad de todas las criaturas que constituyen Gaia."

 - James Lovelock, Gaia: Una nueva mirada a la vida (1972)


La hipĆ³tesis moderna de Gaia fue originalmente formulada por James Lovelock. El Dr. Lovelock es uno de los cientĆ­ficos mĆ”s famosos e influyentes del mundo. Tiene tĆ­tulos en numerosas Ć”reas, incluyendo medicina, quĆ­mica y fĆ­sica. Lovelock trabajĆ³ para la NASA durante los aƱos 60 como consultor del proyecto de la nave espacial Viking. Su tarea era desarrollar mĆ©todos para detectar la vida en Marte. Afirma que mientras buscaba mĆ©todos adecuados se dio cuenta de que las condiciones que permitĆ­an que la vida existiera en la Tierra no podrĆ­an ocurrir "naturalmente". El sistema estĆ” tan bien equilibrado y, sin embargo, tan dinĆ”mico que la vida misma estĆ” actuando como un superorganismo consciente auto-regulador. Le dijo a la NASA que no habĆ­a posibilidad de que existiera vida en Marte y que deberĆ­an cancelar su misiĆ³n.

Lovelock llamĆ³ a su sĆŗper-organismo "Gaia", debido a la antigua Diosa griega de la Tierra. En la mitologĆ­a griega fue Gaia quien "sacĆ³ la Orden del Caos", un tema comĆŗnmente citado en los textos gaianos. Lovelock creĆ­a que los seres humanos eran una parte clave de este organismo. AfirmĆ³ que los seres humanos habĆ­an evolucionado hasta un punto en el que se habĆ­an convertido en el "cerebro global" de Gaia y que "ahora estĆ” a travĆ©s de nosotros despierto y consciente de sĆ­ misma. Ella ha visto el reflejo de su hermosa cara a travĆ©s de los ojos de los astronautas y las cĆ”maras de televisiĆ³n de las naves espaciales en Ć³rbita".


Sin embargo, tambiĆ©n creĆ­a que los seres humanos estaban abusando del planeta ambientalmente, poniendo en peligro el organismo como un todo, "como si la raza humana fuera un cĆ”ncer". En su Ćŗltimo libro, La venganza de Gaia, Lovelock afirma que Gaia estĆ” completamente despierta y estĆ” enojada. Lovelock escribe:

"AsĆ­ como el cuerpo humano usa una fiebre para combatir una infecciĆ³n, Gaia estĆ” elevando Su temperatura para expulsar a un parĆ”sito daƱino - los humanos. A menos que los humanos renuncien a sus formas destructivas y se reĆŗnan a la diversa comunidad de seres vivientes en el amoroso abrazo de Gaia, entonces Gaia se verĆ” obligada a actuar para asegurar Su reino supremo ". En el libro Lovelock tambiĆ©n afirma, que en la trayectoria actual, "la poblaciĆ³n humana se reducirĆ” a unas cuantas parejas reproductoras para finales de este siglo".

Lovelock subiĆ³ a la prominencia global cuando, a finales de los 70, de repente descubriĆ³ que los CFC estaba "destruyendo la capa de ozono protectora de la Tierra". DirigiĆ³ una campaƱa que resultĆ³ en una prohibiciĆ³n internacional de estos productos quĆ­micos. Lovelock fue tambiĆ©n uno de los primeros y mĆ”s vocales defensores de la teorĆ­a del calentamiento global. Para una mente sospechosa puede parecer que controlar y eliminar los CFC era un caso de prueba para el gran premio, controlar y eliminar los combustibles fĆ³siles, eliminando asĆ­ la causa del dolor de Gaia, la sociedad industrial moderna. Sin embargo, a lo largo de su larga carrera Lovelock ha promovido celosamente su teorĆ­a de Gaia. Dos de sus publicaciones mĆ”s recientes se titulan Homenaje a Gaia y La venganza de Gaia.


La hipĆ³tesis de Gaia fue aceptada con entusiasmo por el emergente movimiento de la nueva era en la dĆ©cada de 1970, ya que se combina perfectamente con el misticismo oriental y la teologĆ­a neopagana, pero la "ciencia" era necesaria para convencer a los biĆ³logos. Para estas personas, Gaia se hizo apetecible por el modelo Daisyworld de Lovelock, una teorĆ­a matemĆ”tica y cientĆ­fica diseƱada para refutar las crĆ­ticas del darwinismo.

AsĆ­ como la evoluciĆ³n elimina la necesidad de un creador divino, el modelo de Daisyworld proporcionĆ³ una teorĆ­a de la evoluciĆ³n de la vida en la tierra que incorpora la selecciĆ³n natural con una fuerza de vida sensible. Elimina un Dios personal pero separado, y hace que los seres humanos formen parte del espĆ­ritu divino que es Gaia.

Curiosamente, la climatologĆ­a fue la primera rama de la ciencia que apoyĆ³ activamente la teorĆ­a Gaiana de que la Tierra era un sistema Ćŗnico, autorregulador. Steven Schneider, profesor de ClimatologĆ­a en Stanford, organizĆ³ la primera conferencia cientĆ­fica internacional para discutir "las implicaciones de Gaia". Fue Schneider quien mĆ”s tarde se convirtiĆ³ en el climatĆ³logo que mĆ”s apoyo el calentamiento global y una vez declarĆ³:

"NECESITAMOS OBTENER UN APOYO AMPLIO, PARA CAPTURAR LA IMAGINACIƓN DEL PƚBLICO ... ASƍ QUE TENEMOS QUE OFRECER ESCENARIOS DE MIEDO, HACER DECLARACIONES DRAMƁTICAS SIMPLIFICADAS Y HACER POCA MENCIƓN DE CUALQUIER DUDA ... CADA UNO DE NOSOTROS TIENE QUE DECIDIR CUƁL ES EL EQUILIBRIO CORRECTO ENTRE SER EFICAZ Y SER HONESTO."

La hipĆ³tesis de Gaia, ausente de las connotaciones espirituales, ahora ha sido aceptada en la ciencia convencional y renombrada la TeorĆ­a de Gaia. Puede encontrarse en la mayorĆ­a de los libros de texto sobre ciencias ambientales.

Como se mencionĆ³ anteriormente, la teorĆ­a de Gaia encontrĆ³ su mayor resonancia con el movimiento de la Nueva Era que quedĆ³ fascinado por el lado mĆ­stico de Gaia. Ellos encontraron fĆ”cil concebir que los seres humanos pueden tener una relaciĆ³n espiritual con Gaia. Una conexiĆ³n con la naturaleza y la creencia de que los seres humanos son una parte de esta conciencia colectiva llamado Gaia apela fuertemente a su cosmovisiĆ³n. Una simple bĆŗsqueda google para la gaia pagana, revelarĆ” a miles de organizaciones orgullosamente proclamĆ”ndose a sĆ­ mismas literalmente sacerdotes paganos y discĆ­pulos de la gran Diosa Gaia. Hay docenas de grupos de Gaia en la mayorĆ­a de las ciudades importantes. La Wicca, que se dice es la religiĆ³n de mĆ”s rĆ”pido crecimiento en los Estados Unidos, estĆ” Ć­ntimamente relacionada con la adoraciĆ³n de Gaia. De hecho muchos Gaianos se llaman brujas y brujos.

El movimiento feminista tambiĆ©n ha acogido calurosamente el concepto de una Diosa Gaia. Para muchos de estos defensores, una parte integral de la adoraciĆ³n de la Diosa es su tema predominante de declaraciones anti-masculinas. En esta visiĆ³n filosĆ³fica del mundo, ya que el culto a la Diosa es bueno, entonces por necesidad, cualquier uso de la terminologĆ­a masculina en referencia a Dios o cualquier prominencia de los hombres en la cultura o la sociedad es generalmente desalentado.

Miriam Starhawk declarĆ³:

"El simbolismo de la Diosa ha adquirido un poder electrizante para las mujeres modernas, ha expuesto las falsedades de la historia patriarcal y nos ha dado modelos de fuerza y ​​autoridad femeninas".



Los Gaianos enseƱan que la Tierra Divina debe ser protegida de todas las amenazas, no importa cuĆ”l sea el costo. La EvaluaciĆ³n Global de la Diversidad BiolĆ³gica de las Naciones Unidas, se refiere explĆ­citamente al cristianismo como una fe que ha separado a los seres humanos de la naturaleza y despojado de sus cualidades sagradas.

"La conversiĆ³n al cristianismo ha significado, por tanto, el abandono de una afinidad con el mundo natural por muchos habitantes de los bosques, campesinos, pescadores de todo el mundo. Los estados montaƱosos del noreste de la India limĆ­trofes con China y Myanmar apoyaban a las pequeƱas comunidades hasta los aƱos 50. Estas personas siguieron sus propias tradiciones religiosas que incluyeron apartar entre el 10% y el 30% del paisaje como arboledas sagradas y estanques".

Al mismo tiempo que condena al cristianismo y al Islam como la raĆ­z de todo mal ambiental, el documento continĆŗa alabando al budismo y al hinduismo, ya que "no se apartaron tan drĆ”sticamente de la perspectiva de los seres humanos como miembros de una comunidad de seres incluyendo otros elementos vivientes y no vivos."

Al Gore, en su libro Earth in the Balance, hace eco de esta visiĆ³n:

"La Europa prehistĆ³rica y gran parte del mundo se basaba en el culto de una sola diosa de la tierra, que se suponĆ­a que era la fuente de toda vida y que irradiaba armonĆ­a entre todos los vivos. Muchas de las pruebas de la existencia de esta religiĆ³n primitiva provienen de los muchos miles de artefactos descubiertos en sitios ceremoniales.

Estos sitios estĆ”n tan extendidos que parecen confirmar la idea de que una religiĆ³n de la diosa era omnipresente a travĆ©s de gran parte del mundo hasta los antecedentes de las religiones de hoy en dĆ­a, la mayorĆ­a de las cuales todavĆ­a tienen una orientaciĆ³n claramente masculina ... barrido de la India y el Cercano Oriente , Casi destruyendo la creencia en la diosa. El Ćŗltimo vestigio de la adoraciĆ³n organizada de la diosa fue eliminado por el cristianismo tan tarde como el siglo XV en Lituania."

Gore entonces cita deChardin:
"EL DESTINO DE LA HUMANIDAD, ASƍ COMO DE LA RELIGIƓN, DEPENDE DE LA APARICIƓN DE UNA NUEVA FE EN EL FUTURO." ARMADOS CON TAL FE, PODRƍAMOS ENCONTRAR LA POSIBILIDAD DE RE-SANTIFICAR LA TIERRA..."

Gore tambiƩn cita a un viejo indio nativo diciendo:

"¿Le enseƱarĆ”s a tus hijos lo que hemos enseƱado a nuestros hijos? Que la tierra es nuestra Madre. Lo que sucede a la tierra, sucede a todos los hijos de la tierra. Esto lo sabemos: la tierra no pertenece al hombre, el hombre pertenece a la tierra".


El culto de Gaia estĆ” en el corazĆ³n mismo de la Agenda Verde Global. El Desarrollo Sostenible, la Agenda 21, la Carta de la Tierra y la teorĆ­a del Calentamiento Global son parte de la misiĆ³n de los Gaianos de salvar a la "Madre Tierra" de su infestaciĆ³n humana. Los gaianos han logrado unir el movimiento ambientalista, el movimiento de la nueva era, las religiones orientales, las Naciones Unidas e incluso los lĆ­deres de muchas denominaciones cristianas detrĆ”s de esta vil nueva forma de paganismo.

"La tierra no es materia muerta. Ella estĆ” viva. Ahora comience a hablar a la tierra mientras camina. Usted puede hablar en voz alta, o simplemente hablar con ella en su mente. EnvĆ­ele su amor con su exhalaciĆ³n. Sienta su corazĆ³n tocando el corazĆ³n del planeta. DĆ­gale a ella cualquier palabra que venga a usted: Madre Tierra, te amo Madre Tierra, te bendigo, que seas sanada, que todas tus criaturas sean felices. Paz a ti, Madre Tierra. En nombre de la raza humana, pido perdĆ³n por haberte lesionado. PerdĆ³nanos, Madre Tierra."
- OraciĆ³n a la Tierra, Student Textbook


Cristianismo Y El Medio Ambientalismo

En 2008, los editores Harper One suscitaron una importante controversia con la publicaciĆ³n de su nueva "Biblia Verde". Impresa en papel reciclado con tinta a base de soya, la Biblia fue respaldada por muchas figuras pĆŗblicas como Desmond Tutu. Basada en la Nueva EdiciĆ³n EstĆ”ndar Revisada, La Biblia Verde de acuerdo con Harper One fue diseƱada para equipar y animar a la gente a ver la visiĆ³n de Dios para la creaciĆ³n y ayudarlos a participar en el trabajo de sanar y sostenerla. Con mĆ”s de 1.000 referencias a la tierra en la Biblia, en comparaciĆ³n con 490 referencias al cielo y 530 referencias al amor, la Biblia dice que "Harper One" lleva un poderoso mensaje para la tierra.


Sin embargo, desde su lanzamiento, los evangƩlicos estƔn divididos sobre una "Biblia Verde" que abarca el ambientalismo y la necesidad de proteger la Tierra.

La Biblia Verde, que ha sido respaldada por grupos seculares como la Humane Society y Sierra Club, muestra a la gente que "Dios nos estĆ” llamando a cuidar el mundo que nos rodea", dijo Rusty Pritchard, editor de Creation Care Magazine, una publicaciĆ³n Para los evangĆ©licos. Otros evangĆ©licos estĆ”n preocupados porque la Biblia Verde engaƱa a los cristianos ya que no interpreta literalmente las Escrituras, dijo James Taylor, un anciano fundador de Living Water Christian Fellowship en Palmetto, Florida.

"Estos grupos no tienen un enfoque cristiano, sino que tienen un deseo de difundir su mensaje ambiental", dijo Taylor sobre los ensayistas que contribuyeron a la Biblia Verde, que contiene un prĆ³logo del arzobispo anglicano Desmond Tutu.

Si usted estĆ” leyendo esto y es un cristiano ¿cuĆ”les son sus puntos de vista? ¿DeberĆ­a ser el deber de los cristianos proteger el planeta que es una creaciĆ³n de Dios o debemos sentarnos y no tomar un interĆ©s porque nuestro hogar es un hogar celestial?


Hay una diferencia entre la visiĆ³n bĆ­blica del medio ambiente y el movimiento polĆ­tico conocido como "ambientalismo". Entender esta diferencia configurarĆ” la visiĆ³n cristiana del ecologismo. La Biblia es clara de que la tierra y todo en ella fue dada por Dios al hombre para gobernar y someter. "Y Dios les bendijo, y Dios les dijo: 'Sean fructĆ­feros y multiplĆ­quense, llenen la tierra y somĆ©tanla, y dominen sobre los peces del mar y sobre las aves del aire y sobre todo ser viviente que se mueve sobre La tierra "(GĆ©nesis 1:28). Debido a que fuimos creados a su imagen, Dios les dio a los hombres y mujeres un lugar privilegiado entre todas las criaturas y les ordenĆ³ ejercer la mayordomĆ­a sobre la tierra (GĆ©nesis 1: 26-28, Salmo 8: 6-8). La mayordomĆ­a implica cuidar, no abusar. Debemos administrar inteligentemente los recursos que Dios nos ha dado, usando todo cuidado diligente para preservarlos y protegerlos. Esto se ve en el Antiguo Testamento, donde Dios ordenĆ³ que los campos y los viƱedos fueran sembrados y cosechados durante seis aƱos, luego dejados en barbecho para el sĆ©ptimo aƱo con el fin de reponer los nutrientes del suelo, tanto para descansar la tierra como para asegurar la provisiĆ³n continua de su pueblo en el futuro. (Ɖxodo 23: 10-11, LevĆ­tico 25: 1-7).

Al mismo tiempo, la tierra en la que habitamos no es un planeta permanente, ni se pretendĆ­a que fuera. El movimiento ambiental se consume tratando de preservar el planeta para siempre, y sabemos que este no es el plan de Dios. Ɖl nos dice en 2 Pedro 3:10 que al final de los tiempos la tierra y todo lo que ha creado serĆ”n destruidos: "Pero el dĆ­a del SeƱor vendrĆ” como un ladrĆ³n, y entonces los cielos pasarĆ”n con un fuerte ruido, y los elementos se disolverĆ”n con fuego, y la tierra y las obras que estĆ”n sobre ella serĆ”n quemadas" (NKJV). La tierra fĆ­sica, natural en su forma actual, con todo su universo serĆ” consumida y Dios crearĆ” un "nuevo cielo y una nueva tierra" (2 Pedro 3:13, Apocalipsis 21: 1).

AsĆ­ que vemos que en lugar de tratar de preservar la tierra por miles o incluso millones de aƱos por venir, debemos ser buenos administradores de la misma durante el tiempo que dure, lo cual serĆ” mientras siga el plan y propĆ³sito soberano de Dios. Como cristianos, debemos preocuparnos por nuestro efecto en nuestro medio ambiente. Dios designĆ³ al hombre para ser el mayordomo de este mundo (GĆ©nesis 1:28), no el destructor de Ć©l. Sin embargo, no debemos permitir que el ecologismo se convierta en una forma de idolatrĆ­a, donde los "derechos" de un planeta inanimado y sus criaturas no humanas se tienen en mayor estima que Dios (Romanos 1:25) y el hombre creado a Su imagen. Con el calentamiento global, como con cualquier otro tema, es crucial entender cuĆ”les son los hechos, de quiĆ©n provienen esos hechos, cĆ³mo se interpretan y cuĆ”les deben ser las implicaciones espirituales.


Una verdadera Ć©tica ambiental cristiana difiere de la Ć©tica naturalista y panteĆ­sta en que se basa en la realidad de Dios como Creador y el hombre como su portador de la imagen y administrador. Dios es el Creador de la naturaleza, no parte de la naturaleza. Ɖl trasciende la naturaleza (GĆ©nesis 1-2, Job 38-41, Salmo 19, 24, y 104, Rom 1: 18-20, Col 1: 16-17). Toda la naturaleza, incluido el hombre, es igual en su origen. La naturaleza tiene valor en sĆ­ misma y por sĆ­ misma porque Dios la creĆ³. El valor de la naturaleza es intrĆ­nseco; La roca, el Ć”rbol y el gato merecen nuestro respeto porque Dios los hizo ser como son.

Mientras que el hombre es una criatura y por lo tanto se identifica con las otras criaturas, Ć©l tambiĆ©n es creado a la imagen de Dios. Es esta imagen la que separa a los humanos del resto de la creaciĆ³n (GĆ©nesis 1: 26-27, Salmo 139: 13-16). Dios no le dio su imagen en ninguna otra parte de la naturaleza. Por lo tanto, mientras que un gato tiene valor porque Dios lo creĆ³, no es apropiado romantizar el gato como si tuviera emociones humanas. Todas las criaturas de Dios le glorifican por su misma existencia, pero sĆ³lo una puede adorarle y servirle por un acto de la voluntad. Pero la responsabilidad va acompaƱada de llevar la imagen de Dios. En su sentido propio, el dominio del hombre sobre la tierra es el de un mayordomo o de un cuidador, no de un explotador imprudente. El hombre no es soberano sobre las Ć³rdenes inferiores de la creaciĆ³n. La propiedad estĆ” en las manos del SeƱor.

Dios le dijo a AdĆ”n y Eva que cultivaran y guardaran el jardĆ­n (GĆ©nesis 2:15), y ciertamente podemos usar la naturaleza para nuestro beneficio, pero sĆ³lo podemos usarla como Dios quiere. Un administrador eficaz entiende lo que supervisa, y la ciencia puede ayudarnos a descubrir las complejidades de la naturaleza. La tecnologĆ­a pone la creaciĆ³n al uso del hombre, pero el desperdicio innecesario y la contaminaciĆ³n lo degradan y estropea la capacidad de la creaciĆ³n para dar gloria a su creador. Creo que es Ćŗtil darse cuenta de que debemos ejercer dominio sobre la naturaleza no como si tuviĆ©ramos derecho a explotarla sino como algo prestado o mantenido en confianza. RecuĆ©rdese que en la parĆ”bola de los talentos en Mateo 25, el mayordomo que simplemente enterrĆ³ su talento por temor a perderlo fue severamente castigado. Lo poco que tenĆ­a fue quitado y dado a los que ya tenĆ­an mucho. Cuando Cristo regrese, su tierra puede ser devuelta a Ć©l oxidada, corroĆ­da, contaminada y fea. ¿Hasta quĆ© punto seremos responsables usted o yo?


Debido a que el movimiento ambiental ha sido cooptado por los involucrados en el Movimiento de la Nueva Era, muchos cristianos han comenzado a confundir el interĆ©s en el medio ambiente con interĆ©s en el panteĆ­smo y no han vacilado en involucrarse. Pero no podemos permitir que el enemigo asuma el liderazgo en un Ć”rea que es legĆ­timamente nuestra. Como redimidos de la tierra, nuestra motivaciĆ³n para cuidar la tierra es aĆŗn mĆ”s alta que la del Nuevaerista. JesĆŗs ha redimido todos los efectos de la maldiciĆ³n, incluyendo nuestra relaciĆ³n con Dios, nuestra relaciĆ³n con otras personas y nuestra relaciĆ³n con la creaciĆ³n (1 Corintios 15: 21-22, Romanos 5: 12-21). Aunque los cielos y la tierra eventualmente serĆ”n destruidos, todavĆ­a debemos trabajar para sanarla ahora.

Catolicismo, MarĆ­a y La Madre Tierra

Es probablemente bastante irĆ³nico que el catolicismo, que rinde homenaje a MarĆ­a y la exalte mĆ”s de lo que deberĆ­a, al mismo tiempo identificarĆ­a los peligros de la teorĆ­a de la diosa madre femenina que prevalece en los conceptos del Movimiento Nueva Era.

Esta ironĆ­a es interesante porque oficialmente, la Iglesia CatĆ³lica enseƱa que MarĆ­a era mortal y no es una diosa, pero a pesar de esta posiciĆ³n oficial, muchos catĆ³licos honran a MarĆ­a como una diosa. Otros catĆ³licos veneran a MarĆ­a como Madre de JesĆŗs, pero no como divina.


Visiones de la Virgen MarĆ­a han aparecido a miles de personas en todo el mundo. Sus santuarios sagrados estĆ”n en Lourdes en Francia y Guadalupe en MĆ©xico, asĆ­ como en muchos otros lugares. MarĆ­a fue declarada la "Madre de Dios" por la iglesia cristiana en el 7mo siglo en Ɖfeso, TurquĆ­a. Ɖfeso fue el hogar de un magnĆ­fico templo a la diosa, Artemisa Diana, uno de cuyos tĆ­tulos sagrados fue "Reina del Cielo". MarĆ­a es una encarnaciĆ³n mĆ”s reciente y muy querida de la gran diosa de las antiguas culturas del Medio Oriente. MarĆ­a comparte muchos atributos y sĆ­mbolos tĆ­picos de la diosa.

La iglesia cristiana tambiĆ©n confiriĆ³ el tĆ­tulo de la Diosa a la Madre de JesĆŗs. La llamaron "MarĆ­a, Reina del Cielo" y "MarĆ­a, Reina de los Ɓngeles", ambos son tĆ­tulos muy antiguos de las Grandes Diosas ampliamente adoradas en el Medio Oriente.

Con el tiempo, los nombres y a veces las imĆ”genes de la Virgen y el niƱo han cambiado, pero la ubicaciĆ³n de estos santuarios, y la amplia devociĆ³n a ellos se ha mantenido constante en muchas culturas. La imagen de la Virgen y el NiƱo son centrales para el catolicismo, y a que a menudo eran centrales para el culto pagano de la Diosa Isis y otras diosas en el mundo antiguo.

La Madonna Negra es honrada como una verdadera figura de la diosa, y ha sido asĆ­ desde que el cristianismo entrĆ³ en Europa. Ella es honrada por muchos como Isis, Gaia, Kali, MarĆ­a, "La otra MarĆ­a" (MarĆ­a Magdalena), Diana, Sheela Na Gig, y la antigua madre primitiva madre diosa. Todas son amadas todas son reverenciadas, cada regiĆ³n tiene sus propias tradiciones.

Para muchos cristianos europeos, la mezcla de sus antiguas diosas con la SantĆ­sima Virgen MarĆ­a ha sido un hecho bien aceptado de su fe durante siglos, no hay conflicto. La Santa Virgen Negra, sea ella llamada Isis, o Mary, o Kali, o Diana, encarna todos los aspectos de la Divinidad Femenina para millones de personas. 

El Papa Juan Pablo II estaba profundamente dedicado a la SantĆ­sima Madre e hizo mucho para traer honor y vitalidad a su adoraciĆ³n. Su profunda devociĆ³n a MarĆ­a fue compartida por muchos millones de catĆ³licos de todo el mundo. Fue por el amor a MarĆ­a que la Iglesia CatĆ³lica Romana considerĆ³ elevar a la SantĆ­sima Virgen MarĆ­a al papel de Co-Redentora con su hijo Jesucristo.

Sin embargo, la ironƭa es que algunos ambientalistas estƔn vinculando a la Virgen Marƭa con Gaia. Ya hemos visto que James Lovelock es uno de los defensores mƔs activos del concepto de Gaia y su influencia subrayada en muchas de las iniciativas de ecologƭa verde apoyadas por las Naciones Unidas. En su libro Age of Gaia menciona:

"¿Y si MarĆ­a es otro nombre para Gaia? 
Entonces su capacidad de nacimiento virginal no es un milagro,
es un papel de Gaia desde que comenzĆ³ la vida.
Ella es de este Universo y, concebiblemente,
una parte de Dios. En la Tierra, 
ella es la fuentede vida eterna y estĆ” viva ahora;
Dio a luz a la humanidady somos parte de ella".

Un estudio honesto y cuidadoso de los cultos de las diosas paganas revelarĆ” que, aparte de algunos externos (es decir, la diosa puede ser considerada virgen y / o madre), no tienen nada en comĆŗn con la principal visiĆ³n cristiana de MarĆ­a. La diosa Gaia (Madre Tierra) es un sĆ­mbolo que representa todo lo que va en contra de lo que MarĆ­a quiere que creamos.

Entonces, ¿por quĆ© el movimiento ecolĆ³gico ambiental intenta conectar su religiĆ³n con la MarĆ­a de la Biblia de una manera que incluso los catĆ³licos detestrarĆ­an. La razĆ³n es que asĆ­ como el Movimiento de la Nueva Era cree en el "EspĆ­ritu Universal de Cristo" tambiĆ©n cree en "un espĆ­ritu femenino universal".

Uno tiene que entender que el Movimiento de la Nueva Era busca identificar los denominadores mĆ”s comunes que potencialmente podrĆ­an traer consenso entre todas las religiones y luego usa esto para borrar las fronteras entre la religiĆ³n. Si MarĆ­a es una figura prominente en el judaĆ­smo, el islam y el cristianismo, pero tambiĆ©n hay una figura paralela conocida en el hinduismo como Devi, Sakti y Madhevi o en el budismo como Maria Kannon, entonces el movimiento de la Nueva Era explotarĆ­a este capĆ­tulo comĆŗn con el fin de estirar su engaƱo a los liberales de todas las religiones del mundo que buscan activamente una unificaciĆ³n de la religiĆ³n como un medio para la paz y la armonĆ­a del mundo.

Bahai - La ReligiĆ³n de las Naciones Unidas

La Fe BahĆ”'Ć­ es la mĆ”s joven de las religiones monoteĆ­stas independientes del mundo. Fundada en IrĆ”n en 1844, ahora cuenta con mĆ”s de cinco millones de adherentes en 236 paĆ­ses y territorios. BahĆ”'Ć­s provienen de casi todos los antecedentes nacionales, Ć©tnicos y religiosos, convirtiendo a la Fe BahĆ”'Ć­ en la segunda religiĆ³n mĆ”s difundida del mundo.


Los bahĆ”'Ć­s consideran que las principales religiones del mundo forman parte de un proceso Ćŗnico y progresivo mediante el cual Dios revela su voluntad a la humanidad. BahĆ”'u'llĆ”h (1817-1892), fundador de la Fe BahĆ”'Ć­, es reconocido como el mĆ”s reciente en una lĆ­nea de Mensajeros Divinos que incluye a Abraham, MoisĆ©s, Buda, Zoroastro, Cristo y Muhammad.

El tema central del mensaje de BahĆ”'u'llĆ”h es que la humanidad es una sola raza y que ha llegado el dĆ­a de la unificaciĆ³n de la humanidad en una sociedad global. Mientras reafirmaba los principios Ć©ticos fundamentales comunes a todas las religiones, BahĆ”'u'llĆ”h tambiĆ©n revelĆ³ nuevas leyes y enseƱanzas para sentar las bases de una civilizaciĆ³n global".

Los bahĆ”'Ć­s creen en:

  1. La unidad de la humanidad
  2. El origen comĆŗn y la unidad de propĆ³sito de todas las religiones del mundo
  3. La armonĆ­a de la ciencia y la religiĆ³n
  4. Igualdad de mujeres y hombres
  5. La eliminaciĆ³n de todas las formas de prejuicio
  6. Una soluciĆ³n espiritual a los problemas econĆ³micos
  7. El establecimiento de una comunidad mundial de naciones

La comunidad bahĆ”'Ć­, como organizaciĆ³n no gubernamental debidamente acreditada, ha trabajado durante mucho tiempo estrechamente con las Naciones Unidas, apoyando muchos de sus objetivos y programas y asumiendo un papel de liderazgo en varias reuniones internacionales. Su participaciĆ³n en las Naciones Unidas se remonta a la fundaciĆ³n de la ONU en 1945.


En 1947, las comunidades bahĆ”'Ć­s de los Estados Unidos y CanadĆ” fueron reconocidas por el Departamento de InformaciĆ³n PĆŗblica de la ONU (DPI), y el aƱo siguiente, la propia Comunidad Internacional BahĆ”'Ć­ fue reconocida por las Naciones Unidas como una organizaciĆ³n internacional no gubernamental. En mayo de 1970, se les concediĆ³ el estatus consultivo ante el Consejo EconĆ³mico y Social de las Naciones Unidas (ECOSOC) y, a continuaciĆ³n, bajo la direcciĆ³n de Robert Muller, permitiendo un mayor grado de interacciĆ³n con el Consejo y sus Ć³rganos subsidiarios.

En su propio sitio web, los bahĆ”'Ć­s se jactan de que sus representantes ejercen el liderazgo en varios Ć³rganos relacionados con la ONU, entre ellos el ComitĆ© Ejecutivo de ONG / Departamento de InformaciĆ³n PĆŗblica, el ComitĆ© de ONGs Religiosos, el Caucus de Valores, La ComisiĆ³n de la CondiciĆ³n JurĆ­dica y Social de la Mujer y la ComisiĆ³n sobre el Desarrollo Sostenible. Desde entonces tambiĆ©n se les ha otorgado el estatus consultivo con el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), y las relaciones con los numerosos organismos de las Naciones Unidas se han profundizado y ampliado a lo largo de los aƱos.

La OrganizaciĆ³n BahĆ”'Ć­ afirma tener una estrecha relaciĆ³n de trabajo con la OrganizaciĆ³n Mundial de la Salud (OMS) y con el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente. TambiĆ©n participa en actividades conjuntas con el UNIFEM y el UNICEF, asĆ­ como con muchos otros programas religiosos, ambientales y sociales dentro de la ONU. Las creencias espirituales bahĆ”'Ć­s reflejan casi exactamente las de Lucis Trust y AAC descritas anteriormente. Ellos tambiĆ©n estĆ”n esperando la inminente llegada de un "ser iluminado" que llevarĆ” a la humanidad a un "nuevo orden mundial".

Para los bahĆ”'Ć­s, el tĆ©rmino "nuevo orden mundial" tiene un significado especial y claro. Hace mĆ”s de 100 aƱos, Baha'u'llah invocĆ³ la frase para categorizar una futura serie de cambios trascendentales en la vida polĆ­tica, social y religiosa del mundo.

"Ahora se pueden discernir los signos de las convulsiones y el caos inminentes, en la medida en que la Orden imperante parece ser lamentablemente defectuosa... En fin, se enrollarĆ” el orden actual y se extenderĆ” otro nuevo en su lugar.  Los bahĆ”'Ć­s comprendemos que los dramĆ”ticos cambios y transformaciones que hemos presenciado durante el siglo pasado -y que seguimos viendo- han sido iniciados por la llegada de un nuevo Mensajero de Dios e influenciados por la luz quebrantadora de una nueva RevelaciĆ³n ".

La fe bahĆ”'Ć­ ve a las Naciones Unidas como el recipiente por el cual la unificaciĆ³n de las religiones del mundo en una sola fe llegarĆ” a buen tĆ©rmino. Su plan para el futuro de nuestro mundo y el papel de las Naciones Unidas que supervisan un mundo regionalizado reflejan casi directamente la propuesta delineada por la Commission on Global Governance de Maurice Strong. Los bahaĆ­es escriben:

"LA UNIDAD DE LA HUMANIDAD IMPLICA UN CAMBIO ORGƁNICO EN LA ESTRUCTURA DE LA SOCIEDAD ACTUAL, UN CAMBIO COMO EL QUE EL MUNDO TODAVƍA NO HA EXPERIMENTADO. PIDE NADA MENOS QUE LA RECONSTRUCCIƓN Y LA DESMILITARIZACIƓN DE TODO EL MUNDO CIVILIZADO, UN MUNDO ORGANICAMENTE UNIFICADO EN TODOS LOS ASPECTOS ESENCIALES DE LA VIDA, SU MAQUINARIA POLƍTICA, SU ASPIRACIƓN ESPIRITUAL, SU COMERCIO Y SUS FINANZAS, SU ESCRITURA Y SU LENGUAJE." 

En una declaraciĆ³n a la Cumbre Mundial sobre Desarrollo Sostenible en agosto de 2002, la Comunidad BahaĆ­ escribiĆ³,

"A pesar de los logros significativos, las Naciones Unidas aĆŗn no han comprendido plenamente el papel constructivo que puede desempeƱar la religiĆ³n en la creaciĆ³n de un orden mundial pacĆ­fico y prĆ³spero y el impacto destructivo que el fanatismo religioso puede tener sobre la estabilidad y el progreso del mundo. La ONU debe trabajar incansablemente para exorcizar el fanatismo religioso y la supersticiĆ³n dentro de sus tradiciones de fe y renunciar a las pretensiones de exclusividad religiosa y su finalidad".


En otras palabras, el cristianismo, el judaĆ­smo y el islam son formas de fanatismo religioso que debe ser exorcizado del sistema mundial. Los bahĆ”'Ć­s afirman que la Biblia habla de BahĆ”'u'llĆ”h, sin embargo, la Ćŗnica referencia a BahĆ”'u'llĆ”h en la Biblia es indirecta cuando JesĆŗs y los apĆ³stoles advirtieron de la venida de falsos profetas y falsos cristso (Mateo 7: 15-16, 2 Corintios 11: 13-15). Los versos mesiĆ”nicos de la Biblia citados por bahĆ”'Ć­s como referentes a BahĆ”'u'llĆ”h, no pueden respaldar su afirmaciĆ³n porque, entre otras cosas, BahĆ”'u'llĆ”h era de ascendencia iranĆ­, cuando el MesĆ­as debĆ­a ser judĆ­o Mateo 1, GĆ©nesis 12: 1-3, II Samuel 7: 12-13). AdemĆ”s, el Nuevo Testamento cita repetidamente el cumplimiento de las profecĆ­as de IsaĆ­as en la persona de Jesucristo (Mateo 1: 1, 3:14, 8:17, Lucas 1:31, Apocalipsis 5: 5).

La segunda venida de Cristo tampoco puede referirse a BahĆ”'u'llĆ”h. Las Escrituras indican que el mismo JesĆŗs que subiĆ³ al cielo un dĆ­a regresarĆ” personalmente (Hechos 1: 9-11). La Biblia tambiĆ©n profetiza varias seƱales dramĆ”ticas y muy visibles que acompaƱarĆ”n a la Segunda Venida (Mateo 24:29). Ninguno de estos signos estuvo presente cuando Baha'u'llah llegĆ³ a la escena. Ɖl tambiĆ©n no apareciĆ³ en el lugar correcto. La Escritura indica claramente que en la Segunda Venida el MesĆ­as vendrĆ” a JerusalĆ©n y sus pies tocarĆ”n fĆ­sicamente el Monte de los Olivos (ZacarĆ­as 14: 4). Baha'u'llah nunca hizo esto.

El EspĆ­ritu de verdad en Juan 16: 12-13 tampoco puede referirse a BahĆ”'u'llĆ”h. Juan 14-16 identifica claramente al EspĆ­ritu de la Verdad como el EspĆ­ritu Santo (Juan 14: 16-17, 26). JesĆŗs dijo que Su promesa del EspĆ­ritu Santo se cumplirĆ­a "en pocos dĆ­as" (Hechos 1: 5), no en el 1800 cuando Baha'u'llah naciĆ³. Este cumplimiento vino en el DĆ­a de PentecostĆ©s en Hechos 2. La funciĆ³n del EspĆ­ritu Santo es dar a conocer las enseƱanzas de JesĆŗs, no reemplazarlas con las interpretaciones de otro profeta. JesĆŗs tambiĆ©n dijo que el EspĆ­ritu Santo estarĆ­a con nosotros para siempre (Juan 14:16). Baha'u'llah muriĆ³ en 1892 a la edad de 75 aƱos.

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